Un Minuto y Diecisiete Segundos

Los siguientes dos párrafos pertenecen al libro de Bill Bryson «A Short History of Nearly Everything» o traducido al español como «Una Breve Historia de Casi Todo», donde nos muestra una perspectiva apropiada de la importancia de la humanidad en la historia de nuestro planeta:

«Si tu imaginas los 4,500 millones de años de la historia de la tierra comprimidos dentro de un día normal entonces la vida comienza muy temprano, alrededor de las 4 a.m., con la aparición de los primeros organismos unicelulares, pero no sucede nada mas por las primeras dieciséis horas.  No hasta las dieciocho horas y media de la tarde, con casi cinco sextas partes del día terminados, la tierra no tiene mucho que mostrar al universo, solo una capa de microbios.  Luego, finalmente aparecen  las primeras plantas marinas, después de veinte minutos se ve la primera medusa y la enigmática fauna Ediacara… A las 9:04 p.m. entran en escena  trilobites nadando, seguidos mas o menos inmediatamente por las criaturas del Esquisto de Burgess.  Justo antes de las 10 p.m. las plantas empiezan a nacer en la tierra.  Poco después, con menos de dos horas para que se termine el día, se asoman las primeras criaturas que habitan los suelos.

Gracias a más o menos 10 minutos de clima agradable, alrededor de las 10:24 p.m. la tierra está cubierta de grandes bosques carboníferos cuyos residuos nos proveen del carbon actualmente, y los primeros insectos con alas hacen presencia.  Los dinosaurios entran a escena lentamente justo antes de las 11 p.m. y dominan la tierra por alrededor de tres cuartos de hora. Faltando veintiún  minutos para llegar a la medianoche los dinosaurios desaparecen y la era de los mamíferos empieza.  Los humanos emergen un minuto y diecisiete segundos antes de la medianoche. La historia completa ha sido registrada, en ésta escala podría no ser más que unos pocos segundos, la vida humana apenas es un instante»